¿CÓMO EDUCAMOS A LOS NIÑOS?

Cada familia, incluso cada persona, tiene su propio estilo educativo, es decir, su forma de educar.Las variaciones en el estilo educativo vienen dadas por el ambiente cultural en que vive la familia, por los recursos económicos de que disponen, o por el estilo que se le aplicó a la persona en su infancia.

Teniendo en cuenta esto podemos diferenciar cuatro estilos educativos: 

ESTILO AUTORITARIO

Es un estilo centrado en los padres. Establece un sistema comunicativo unidireccional en que los padres dan órdenes sin explicación y restringen la autonomía de los hijos. Es habitual el uso de amenazas, castigos y prohibiciones sin ningún tipo de razonamiento.

• Características: alto nivel de exigencia a los hijos. Los padres no cambian sus técnicas de disciplina en función del contexto, edad u otras variables.
• Consecuencias educativas: 
  

1. Bajos niveles de autoestima, autonomía personal, creatividad y competencia social.
2. Los hijos pueden mostrar sentimientos de frustración o culpabilidad al no poder cumplir los deseos de los padres.
3. Tienden al conformismo y a la sumisión. Suelen ser pasivos y tímidos y vivir ansiosos de obtener la aprobación de los demás-
4. Ansiedad por el distanciamiento emocional de sus progenitores.

ESTILO DEMOCRÁTICO O ASERTIVO

Es un estilo centrado en los hijos. Los padres explican las razones del establecimiento de las normas, reconocen y respetan la individualidad de los hijos y sus derechos, negocian y toman decisiones conjuntamente intentando fomentar comportamientos positivos e inhibiendo los no adecuados. Las relaciones se caracterizan por el respeto mutuo, la cooperación y los deberes recíprocos, y los conflictos son poco frecuentes y leves.

• Consecuencias educativas: 

1. Sentido de la responsabilidad y la asunción de las consecuencias de sus actos.
2. Competencia social y facilidad de interacción.
3. Actitudes de cooperación, de toma de decisiones y respeto por las reglas y de habilidades de trabajo en equipo.
4. Autoconcepto realista y positivo, que se traduce en un buen nivel de autoestima y autoconfianza.
5. Elevada motivación de logro, manifestado en mejores calificaciones escolares.

ESTILO PERMISIVO

Está basado en la tolerancia. El control paterno es muy laxo y el nivel de exigencia muy bajo. Los padres acceden fácilmente a los deseos de los hijos y se muestran tolerantes ante impulsos de ira o agresividad. Suelen brindar excesiva protección para evitar que los hijos se enfrenten a las dificultades de la vida, por lo que las normas son poco estrictas.

• Características: libertad acompañada por apoyo emocional.
• Consecuencias educativas: 

1. Los menores tienden a ser egocéntricos, dependientes, con dificultades para el esfuerzo, traducido en bajos logros escolares.
2. Carecen de autocontrol y anteponen sus deseos y necesidades a los de otras personas.
3. Presentan altos niveles de autoestima y de autoconfianza.

ESTILO NEGLIGENTE

Está basado en una baja exigencia parental, falta de sensibilidad por las necesidades de los hijos, sin expresión afectiva ni comunicación. Los padres suelen renunciar a sus actividades como tales.

• Consecuencias educativas:

1. Los hijos desarrollan un autoconcepto negativo y carencias de autoconfianza.
2. Escaso sentido del esfuerzo y bajos logros escolares.
3. Mayor predisposición a padecer trastornos psicológicos y desviaciones graves de la conducta.

FUENTE:  Intervención con familias y atención a menores en riesgo social, Montse Sorribas, Alicia García, Mercé Gras, CFGS Educación Infantil.