miércoles, 15 de febrero de 2012

QUÉ DEBEMOS SABER ACERCA DE LOS DIENTES DE LOS NIÑOS

CUIDADO DE LOS DIENTES DE LECHE



La higiene bucodental debe iniciarse cuando al niño le salen los primeros dientes.


Los dientes de leche son muy importantes, ya que su desarrollo sano es fundamental para que el niño pueda lucir una sonrisa sana en su etapa adulta.

Cuando al niño le sale el primer molar de leche, el cepillado cobra importancia. Es cuando el pequeño debe empezar a cuidarse los dientes. Existen cepillos muy suaves para que los niños aprendan a lavarse los dientes en sus primeros años de vida. Lo ideal es que se lo hagan tres veces al día, una después de cada comida, especialmente antes de acostarse.

Sin embargo, algunos niños, a pesar de mantener una correcta higiene bucodental, tienen mayor tendencia a padecer caries. Las causas pueden ser varias; desde tener las fisuras más pronunciadas hasta tener un esmalte más débil o un determinado tipo de saliva.

Lo aconsejable es acudir al dentista cada seis meses para seguir un control de la salud de los dientes. De esta forma, se establece un control de la caries y otras afectaciones como la gingivitis, una inflamación en las encías causada por los restos alimenticios que quedan atrapados entre los dientes.


La higiene de los dientes de leche resulta fundamental para un correcto desarrollo de la salud bucodental del niño. Descubre los consejos a seguir para que tu hijo cuide adecuadamente de sus primeros dientes.

1. Debe lavarse los dientes tres veces al día, una vez después de cada comida. Es especialmente importante el cepillado de la mañana, después del desayuno, y el de la noche, antes de acostarse.

2. Debes dejar que el niño vaya participando en la higiene bucal según su edad. Por la noche puedes controlar que se haya realizado correctamente.

3. Cuando el niño tenga el control suficiente, puedes introducir un colutorio infantil con flúor después del cepillado.

4. Es aconsejable que le ayudes a pasar el hilo dental por las noches, sobre todo entre los molares, ya que es la zona más propensa a la aparición de caries en los niños y el cepillo no llega a limpiar esta zona de forma adecuada.

5. Tras la limpieza de los dientes, el niño solamente puede beber agua. No es aconsejable que vaya a la cama con zumos, leche, etc.

6. El pequeño no debe abusar de alimentos azucarados y pegajosos, ni de bebidas azucaradas.

7. La dieta debe incluir abundantes lácteos, frutas y verduras.

8. Si el niño realiza deportes de contacto o de riesgo, debe utilizar un protector bucal para evitar fracturas o lesiones.

9. El niño debe acudir a revisiones periódicas al dentista.

10. En caso de tener alguna patología, debe tratarse para prevenir problemas.

CÓMO DEBE DE SER SU PRIMER CEPILLO DE DIENTES

Llega un momento en el que el niño debe familiarizarse con el cepillo de dientes. Pero, ¿cómo debe ser? Te explicamos qué características deberá tener su primer cepillo de dientes.

Las cerdas tienen que ser suaves, con las puntas redondeadas y dispuestas, por lo menos, en tres filas. Es mejor elegir cerdas sintéticas en lugar de las animales que, al estar vacías en su interior, pueden almacenar muchas bacterias. Con respecto a la forma de las cerdas, los expertos no han llegado a un acuerdo: unos aconsejan que sean de superficie plana y otros, levemente ondulada.
Con tener un único cepillo no basta, hacen falta dos; uno para la mañana y otro para la noche. No hay que limpiar los dientes con el cepillo húmedo, que resulta demasiado suave para funcionar bien: el cepillo de nailon tarda un día entero en secarse. Para acordarse de cuál es el cepillo de la mañana y cuál el de la noche, sólo tendremos que comprarlos de colores distintos.

El cepillo para los niños tiene que ser bastante pequeño, no sólo para poderse adaptar a las dimensiones de la boca, sino también porque, como mucho, se deben limpiar dos dientes a la vez.

Cada dos meses hay que sustituir el cepillo, porque con el uso las cerdas se estropean, se deforman y se distancian, entre ellas, y ya no limpian bien, además de que pueden dañar las encías.

FUENTE: http://www.mibebeyyo.com

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