martes, 17 de enero de 2012

¿CÓMO PROTEGER A LOS NIÑOS FRENTE A LOS RESFRIADOS?

Todos sabemos que cuando los niños empiezan a ir a la guardería o al colegio suelen encadenar una mala racha de infecciones. Las clases, igual que cualquier otro lugar cerrado donde conviva un amplio número de personas, son una fuente de virus, bacterias y microorganismos causantes de enfermedades.
Entre ellas, los resfriados y otras infecciones respiratorias, como las anginas, están a la orden del día, sobre todo en los meses de otoño e invierno.
La causa de que los niños de corta edad sean más propensos a adquirir infecciones es que su sistema inmunitario -sus defensas- se encuentra todavía inmaduro y no responde de manera totalmente eficaz a la invasión por bacterias o virus. Entre los más pequeños no son extrañas las infecciones de repetición o recurrentes, que provocan la aparición de diferentes episodios de la misma enfermedad en un periodo corto de tiempo. El problema que conlleva es que estas infecciones repetidas debilitan las defensas y aumentan el riesgo de que el niño contraiga otras infecciones.
Refriados
El resfriado es una de las enfermedades más frecuentes del mundo y puede estar causado por más de 200 virus conocidos distintos. Se calcula que los niños pueden enfermar de resfriado entre 6 y B veces al año, aunque la mayoría de casos son leves y duran aproximadamente una semana. A pesar de ello, son la principal causa de visitas al médico y de pérdida de jornadas escolares.
Lo recomendable es dejar descansar al niño tanto como necesite, y hacer que beba líquidos con frecuencia, pues los líquidos calientes, aunque no excesivamente, y la humidificación del aire ayudan a eliminar la mucosidad.
Que el niño requiera medicamentos es decisión del pediatra. Los antibióticos no van a ser de ayuda en el caso de los resfriados, puesto que los culpables de la enfermedad son los virus. En todo caso serán los antitérmicos-analgésicos y algún otro producto para la descongestión nasal o la tos los que puedan ser de utilidad para aliviar algunos síntomas, siempre a las dosis apropiadas que haya determinado el médico.
Para prevenir los resfriados' es necesario que el niño comparta alimentos, pañales o toallas con los compañeros de la escuela, enseñarle a estornudar y toser sobre pañuelos desechables y a lavarse las manos a menudo.
La maduración de las defensas naturales del niño es un proceso que dura varios años. Lo normal es que, con el tiempo, las infecciones de las vías respiratorias altas les afecten de una manera cada vez menos frecuente.
Para favorecer este proceso, se puede ayudar a fortalecer el sistema inmunitario con productos naturales que favorezcan la disminución de la aparición de infecciones. Desde hace siglos se usan con ese fin algunas plantas medicinales y sustancias extraídas de ellas. Entre estos compuestos destacan los betaglucanos, que se encuentran en algunas especies vegetales, como los cereales, las algas y en algunas especies de setas agentes infecciosos capaces de causar enfermedad.

FUENTE: Revista farmacéutica "Cosas de mamás y niños"

No hay comentarios:

Publicar un comentario