jueves, 12 de enero de 2012

CÓMO AYUDAR AL BEBÉ A EXPULSAR LOS GASES

El eructo suele salir de manera espontánea mientras el bebé toma el pecho o bien el biberón. Sin embargo, hay algunos niños que necesitan ayuda para expulsar el aire.

Hay algunos niños a quienes les cuesta expulsar el aire que han tragado durante la toma. Para que el bebé eructe bien hay que ayudarle con una buena postura.

En ocasiones, cuando el bebé ha acabado su toma, en lugar de sentirse tranquilo y satisfecho, se agita y hace aspavientos con los brazos. Lo que le ocurre es que no ha hecho el eructo, gracias al cual libera el aire que ha tragado durante la succión.

No todos los niños sienten la necesidad de expulsar este aire. Sin embargo, para muchos otros, sobre todo, los bebés más glotones y tragones, el hecho de no hacer el eructo supone un verdadero impedimento para poder relajarse y estar tranquilo.

La mamá puede ayudar al bebé a eructar colocándolo en la posición correcta:

1. APOYADO EN TU HOMBRO
Si el bebé tiene dificultades para eructar, ésta es la mejor posición:
Manténlo con la espalda recta y la barriga apoyada en tu pecho. Procura que apoye la cabecita sobre tu hombro.De esta forma, su estómago permanece bien distendido y relajado. Con la mano libre, dale un suave masaje en la espalda, de abajo hacia arriba. Esto le ayudará a expulsar el aire.

2. UN GOLPECITO SOBRE LA ESPALDA
Si todavía no llega el tan esperado eructo, prueba a cambiarle de posición: Sienta al bebé sobre tus rodillas, ligeramente inclinado hace delante sobre tu mano derecha. Con la mano izquierda, dale unos suaves golpecitos en la espalda.

3. TENDIDO SOBRE LA BARRIGUITA
Tiéndele boca abajo sobre tus piernas, con la cabecita apoyada en tu muslo. Mantén la mano izquierda sobre su culito y, con la derecha, hazle un masaje firme en la espalda, con movimientos bastante lentos, suaves, regulares y sin cambios bruscos.

4. SENTADO SOBRE TUS RODILLAS
A partir de los tres meses de vida del bebé, cuando el pequeño pueda mantener la espalda recta sin esfuerzo, inmediatamente después de comer, siéntale sobre tus piernas y sujétale por debajo de las axilas. Después, haz que dé unos pequeños saltitos.

Qué hacer (y qué no hacer):

Dar al bebé masajes suaves en la espalda, manteniéndole en posición erguida y apoyado en el hombro del que le mantiene en brazos.

• Si no eructa después de algunos minutos, significa que no necesita hacerlo o que ya lo ha hecho y no nos hemos dado cuenta.

• No mantener al niño sentado, porque en esta posición el estómago se dobla sobre sí mismo y el aire no consigue salir.

Debes tener en cuenta que, si después de probar todas estas posiciones, el niño no ha conseguido eructar, es probable que en su estómago no haya aire que expulsar.Ver imagen en tamaño completo
                                                              




Fuente: Revista mi bebé y yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario