- La hora de la comida es un buen momento para fomentar los lazos afectivos y la educación en alimentación saludable.
- Lavarse las manos es un hábito muy agradable y saludable.
- Los estilos de vida se aprenden a una edad muy temprana. Son el conjunto de creencias, valores y conductas que nos hacen llevar una vida saludable o no.
- La comunicación incluye todo tipo se situaciones e implica confianza.
- La escuela refuerza los hábitos adquiridos en la familia.
- Fomentar la relación social aumenta las habilidades individuales y la salud emocional.
- El consumo de frutas y verduras es un hábito muy saludable. Para fomentar su consumo se puede jugar con los colores, texturas y sabores.
- Lavarse las manos es una actividad rutinaria que se realiza antes de la alimentación o después de tocar objetos que manchan. Es un paso indispensable hacia la adquisición del hábito de la higiene personal. También evita problemas al tocarse las mucosas (boca y nariz) y previene infecciones.
- El juego favorece la atención a los estímulos que queremos potenciar.
- Los cambios que se producen en los primeros años de vida son inversamente proporcionales a la edad. Lo que significa que los primeros años son los momentos del desarrollo por excelencia.
- El amamantamiento crea un vínculo especial entre la madre y su bebé.
- La lactancia materna proporciona a los bebés el aporte calórico necesario para un crecimiento óptimo que otros alimentos no poseen.
- El crecimiento actual, según la OMS, se ha incrementado en los niños/ niñas de 0-5 años debido a la alimentación de la lactancia materna durante el primer año de vida.
- Los niños controlan antes lo movimientos de los brazos que los realizados con los dedos.
- El hecho de que un recién nacido nos coja con su mano no es signo de reconocimiento o afectivo sino de supervivencia (reflejo de presión palmar).
- Las pruebas y test que se realizan al recién nacido después del parto son fundamentales para asegurar su salud.
- Las visitas regulares al pediatra son fundamentales para controlar los patrones de crecimiento de los niños.
- Seguir el calendario de vacunación es fundamental para prevenir enfermedades.
- En los momentos delicados a la alimentación, debemos mostrar tranquilidad hacia el niño.
- El momento de la comida es también un momento de relación.
- Dormir menos de lo que el niño necesita de manera habitual puede producir alteraciones de aprendizaje y conductuales.
- Ir a la escuela es la actividad propia del niño y hay que respetar, fomentarla y cuidarlo.
- El huerto es un recurso educativo muy gratificante mediante el cual se puede trabajar múltiples objetivos: respeto a la naturaleza, cooperación, autonomía, responsabilidad…
- Es aconsejable seguir las mismas rutinas cada noche al acostar al niño para evitar excitabilidad y facilitar el sueño.
- La falta de descanso disminuye la atención y el seguimiento de la actividad.
- Una actividad física estimulante activará los resortes de atención y aprendizaje.
- Es importante el aprendizaje de pautas de respeto en relación al descanso de los otros.
- El juego es el mejor vehículo para enseñar hábitos básicos.
- Las actividades lúdicas son fundamentales en la infancia.
- Dejar a los niños que participen y colaboren en las actividades cotidianas favorece la adquisición de su autonomía.
- La hora de comer es un momento de descubrimiento, experimentación, observación y manipulación.
- En los niños muy pequeños, a menudo es mejor un tazón cóncavo que un plato plano, para facilitar la utilización de la cuchara.
- El momento del baño debe ser una experiencia gratificante para el niño.
- El juego simbólico es una forma innata y espontánea de aprendizaje.
- Las pequeñas responsabilidades van haciendo al niño cada vez más autónomo.
- El afecto y el sentirse querido es tan importante como el descanso, la higiene o la alimentación.
- El chupete tiene una función analgésica y relajante en el lactante, su uso excesivo es contraproducente.
- La introducción de la utilización de los cubiertos se inicia con la cuchara.
- Dormir con juguetes o similares, en ocasiones crea dependencia en los niños.
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