Las gominolas infantiles son productos de confitería compuestos por una pasta maciza elaborada con azúcar, aromatizada y coloreada mediante un generoso uso de aditivos y que se presenta con formas y tamaños variados.
Son un producto de alto nivel calórico con una muy baja cantidad de nutrientes, ya que están compuestas entre un 75 y un 80% de azúcar.
Este azúcar es fácilmente asimilado por el organismo y rápidamente convertido en glucosa, la cual es transformada en glucógeno, que se almacena en el hígado y en los músculos para convertirse en energía.
Pero cuando ese contenido se sobrepasa por excesos, se convierte en grasa, convirtiendo al niño en un posible candidato a padecer sobrepeso y obesidad infantil.
Pero cuando ese contenido se sobrepasa por excesos, se convierte en grasa, convirtiendo al niño en un posible candidato a padecer sobrepeso y obesidad infantil.
Si a esto le sumamos que son un causante directo de las caries, las gominolas se convierten en un alimento nada recomendable el consumo de los niños. Sin embargo, por más que los padres intenten retardar lo más posible que sus hijos las prueben, es inevitable.
Y no pasa nada porque de vez en cuando los niños coman alguna golosina, pero debería ser muy de vez en cuando. A continuación os proponemos una receta para enseñaros a realizar gominolas caseras, mucho más sanas, ya que están hechas con gelatina y azúcar, sin conservantes y con el valor añadido de que las podéis preparar con los niños.
Ingredientes:
- 2 sobres de gelatina neutra.
- 1 sobre de gelatina con sabor.
- 2 veces la medida de la gelatina con sabor de agua (aproximadamente 2 tazas pequeñas).
- 3 veces la medida de la gelatina con sabor de azúcar (aprox. 3 tazas pequeñas de azúcar).
- Azúcar granulado para rebozar las gominolas.
Preparación:
La primera parte os corresponde a vosotros ya que es necesario utilizar el fuego. Introducir todos los ingredientes en un cazo y calentar a fuego suave removiendo constantemente sin que llegue a hervir.
Mojar con agua fría un molde rectangular y verter la gelatina. También podéis utilizar moldes para cubitos de hielo con diferentes formas. Se aconseja los de plástico blando porque luego será más fácil desmoldarla. 
Introducir en la nevera y dejar que se enfríe. Cuando veáis que ha cogido la consistencia adecuada, es el momento de sacarla.
Aquí entran en acción los niños porque llega la parte más divertida que es rebozarlas con azúcar. Otra cosa que gustará a los niños es cortar con diferentes formas la que vertimos en la plancha rectangular, con cortadores de galletas formas distintas.
FUENTES:
http://www.guiainfantil.com/1286/cocinando-con-ninos-gominolas-caseras.html
http://www.naturpeques.net/gominolas-salud-cuidado-con-las-gominolas
No hay comentarios:
Publicar un comentario